Martín Elías Müller

Rugen las Islas

La Causa Malvinas en la Voz del Metal Pesado Nacional



El heavy metal (de aquí en más, Metal Pesado) no es, como suele creerse, únicamente un estilo de música o una forma de vestir; se trata de un fenómeno cultural (o contracultural si lo consideramos como oposición a los mandatos de la cultura hegemónica y dominante) que guarda una estrecha relación con la identidad como construcción individual pero fundamentalmente colectiva y social; con modos específicos de ser y estar en el mundo.

Nace en el Reino Unido a finales de la década del ́60 entre sectores de la clase trabajadora fabril y otros históricamente postergados y marginados. Existe un acuerdo general en considerar a BLACK SABBATH como la banda pionera del movimiento.

En Argentina irrumpe a principio de los años ́80, en el contexto de los últimos años de la dictadura que asolaba al país, y lo hace como un movimiento social conformado por jóvenes provenientes de barrios populares y marginales, hijos de la clase obrera y el pueblo. Se considera a V8 como el exponen- te principal y funda- mental, no sólo por su aporte musical y lírico, sino también por sus posturas políticas.

Ariel Panzini, miembro del Fanzine Digital Especializado en estudios sociales sobre heavy metal, abogado, escritor, remarca que “la identidad colectiva del metal argentino surge de la memoria colectiva que le imprimen sus integrantes...representa la reivindicación de las luchas y demandas de los sectores populares, en particular, la clase trabajadora... Entonces, la Causa Malvinas, por corresponderse a una causa del pueblo argen- tino, y no así de ningún gobierno de turno específico, nos explica el por qué asume un lugar central dentro del discurso hegemónico del metal argentino.”

“RUGEN LAS ISLAS. La causa Malvinas en la voz del metal pesado nacional”, es un trabajo de investigación que, desde posiciones malvinizadoras (1), intenta explicar los vínculos que unen a una causa del pueblo con una cultura (contracultura) del pueblo, “...según el autor, las diferentes administraciones políticas del país, aunque con matices lógicos entre cada una de ellas, tendieron a “desarrollar y consolidar (un) proceso de desmalvinización”, que asocia a las acciones de dependencia, tanto en materia política como económica, cultural, y militar, ejecutadas por el imperia- lismo moderno, comprendido por un puñado de países opresores y dominantes, sobre el resto de países del mundo oprimidos y dominados, a fin de satisfacer las necesidades de aquellos, por supuesto, en detrimento de las soberanías locales del grupo de estos últimos” (Panzini, Ariel)

Ha sido y sigue siendo esta cultura popular la que se hizo cargo de cantarle a MALVINAS desde sus comienzos, de tener presente la causa y a sus hombres desde hace 40 años. En referencia a lo expresado, Ariel Panzini dice que el autor “...resalta la fuerte empatía del metal argentino con la Causa Malvinas, en particular, los ex combatientes categorizados como héroes; el repudio al imperialismo que rodea al asunto, como así también a las políticas represivas aplicadas por la dictadura convocante a la guerra contra la movilización popular y obrera, conjunto de conceptos que vincula entre sí y trae a discusión respecto a la postura del metal argentino; pero, sobre todo, deja en claro la impostergable necesidad de malvinizar, no como fetiche de falsos nacionalismos o premisas exi- tistas y pasatistas de culturas dominantes , sino como un grito de lucha contra los que pretenden el olvido y la traición hacia quienes dieron todo por una causa perteneciente al pueblo argentino, algo que el metal argentino no está dispuesto a negociar”.

A lo largo de más de 300 páginas, desde su sentido prólogo, con un desarrollo que va desde la introducción, pasa por siete capítulos, la necesaria y contundente conclusión, los anexos y una selectiva galería de imágenes, sienta posición política sobre la causa, aborda desde la crítica los contactos de la misma con el mundo del rock y en especial con el del metal en Argentina, destacándose, en sus páginas, una serie de entrevistas federales a diversos protagonistas de la escena, haciendo un fuerte hincapié en los que habitan la región patagónica y el relevamiento y análisis de aproximadamente 230 temas musicales dedicados a la causa en las distintas décadas, en todas las regiones que componen el país y en los más diversos subgéneros del metal pesado.

Cómo escribió Gustavo Zavala –Q.E.P.D.- (APOCALIPSIS, TREN LOCO, S.U.R.) para el prólogo: “este libro te lleva a ese montón de ideas y pensamientos que entrelazan la guerra, el valor de los pibes de 18 años, el de los pilotos de la aviación y la música que amamos; y también te acerca al misterio de entender por qué la música que más la retrató es el heavy metal”. Esta segunda edición, también editada de manera independiente, a diferencia de la primera (2020) complementada con un compilado musical de 14 temas en formato disco compacto; es acompañada por un audiovisual en formato DVD producido y dirigido por el autor de la investigación, en conjunto con Brizar3D Producciones en la parte técnica. Pensado, principalmente, como material para instituciones educativas, bibliotecas populares y centros culturales, a lo largo de 37 minutos, el documental que cuenta con el testimonio y la presencia de importantes protagonistas de la escena del metal pesado en Argentina entre los que se destacan el de Alberto “Beto” Zamarbide (V8), Gustavo Noé Zavala (Tren Loco), Juan Carlos “Olaf” Mangialavore (El Dragón), Mario Aguirre (Raza 1982), Maximiliano Escobar (Malicia) y el VGM Marcelo Pérez Schneider (Presto Vivace); sumados a la participación de destacados referentes de la escena del metal en Patagonia y a la presencia del VGM Owen Crippa; refuerza la idea central del libro tornándola más contundente y emotiva por emplear el lenguaje audiovisual. “RUGEN LAS ISLAS. La causa Malvinas en la voz del Metal Pesado Nacional” es el abrazo hermanado de sentires y expresiones profundas de nuestro pueblo, es la síntesis de algunas de las pasiones que movilizan a “los y las de negro”; es el testimonio contracultural que habla del respeto a miles de hombres (los bravos de Malvinas) que combatieron en condiciones muy difíciles, a quienes pusieron el cuerpo en aquellos días, a quienes se marcharon trágicamente una vez finalizado el conflicto. A los íconos de una guerra librada con valentía y arrojo que puso en jaque a la tercer potencia militar de entonces. Como expresé a mediados de junio, en el cierre de la ponencia en el marco de la 38° Feria Provincial del Libro en la localidad de Gaiman, Chubut: “Si “RUGEN LAS ISLAS” llega a las manos de nuestros VGM, ex combatientes, movilizados, familiares, amigos, gente malvinera en general, para que conozcan de qué se trata esta cultura y para que sepan que ésta nunca olvidó ni renunció a la memoria. Si permite que cientos de seguidores del metal a lo largo y ancho del país abracen esta causa y a sus hombres a través de su lectura; la misión habrá sido, definitivamente, cumplida”.

Nota 1) Desde la crítica y la polémica con aquellas posiciones de gobernantes, funcionarios, intelectuales, medios, etc. que cuestionan y/o ningunean la recuperación, defensa y guerra por las Malvinas en 1982, que consideran que fue injusta o no legítima porque el gobierno era una dictadura, que hablan de agresión argentina; incluso la consideran y encuadran dentro de la represión dictatorial. Critican el uso de las armas para la defensa de la soberanía y el haber enfrentado a la corona británica pudiendo afectar sus intereses en el país. Desmalvinizar es rechazar la decisión de que esta nación del tercer mundo haya recuperado su plena soberanía durante 74 días, enfrentando con valentía, con coraje, con fuerte respaldo popular y latinoamericano a uno de los enemigos históricos como lo es el imperio británico. Desmalvinizar es no afectar los intereses británicos en el continente, ni denunciar los tratados de Londres y Madrid. Su eje central es el relato de la “guerra injusta”, “la aventura de un borracho”, “los pobres chicos de la guerra”; dejando de lado la justeza y la lucha en esta causa del pueblo que resulta irrenunciable. Martín Elías “Tito” Müller Es profesor y licenciado en Artes Plásticas especializado en Grabado. Desde el año 2005 reside en la ciudad de Esquel, Chubut donde se desempeña como docente. En paralelo desarrolla su obra plástica. Desde el año 2011 produce y conduce el ciclo radial “Oíd Mortales!” emitido durante nueve años por Radio Comunitaria Kalewche FM; y desde el año 2020 desde el aire de Radio Pública Municipal Esquel. En el año 2013 edita en formato papel, la revista/fanzine “Leed Mortales” de forma independiente y autogestiva. Desde marzo a diciembre del año 2020, formó parte del equipo de producción del ciclo de difusión de audiovisuales de bandas de metal patagónicas “Mirad Mortales” (disponible en YouTube en el canal: Oíd Mortales TV ).